Me gustabas tanto porque eras fácil de querer y difícil de olvidar, eras tan fría, pero tu mirada era tan cálida...
Chica del día y la noche, ama de los contrastes, sencilla y complicada a la vez, eras mi pequeña cajita de música a la que me gustaba darle un poco de cuerda cada noche antes de dormir y sentir tu música rodeándome las frías noches de noviembre. Que bonito era quererte en invierno, levantarme a media noche y verte dormida a mi lado, darte un beso sin que te dieses cuenta, echarte el brazo por encima y volver a dormir.
Despertarme por la mañana y no verte, pero entre tanto frío, estirar la mano hacia tu lado de la cama y sentir aún tu calidez. Que fácil era quererte en invierno, acostumbrarse a tus besos traviesos bajo las sábanas, entrecruzar mis dedos con los tuyos y, sin mas, mirarnos durante el tiempo que hiciese falta, hablando sin palabras.
Pequeño cristal de hielo, dueña de mis escalofríos y tiriteras, la única persona que conseguía dejarme en blanco, sin palabras. Y que me gustase.
Mi chica de hielo, que fácil era quererte en invierno. Y amarte toda una vida
Solo soy alguién que necesitaba soltar lo que sentía por algún lado. No pretendo ser un escritor famoso ni un poeta de renombre. Mi única intención es hacerte sentir algo.
viernes, 13 de noviembre de 2015
miércoles, 21 de octubre de 2015
Siempre soñé con ver un amanecer desde la cubierta de un pequeño barco solo para mi, sentir que el interminable azul del océano me rodea haciéndome sentir aún mas pequeño, notar la brisa acariciándome y respirar el aire fresco mientras me mece la marea y, ahí, sin pensar en nada, dejar que el tiempo pase, que se haga de noche para ver las estrellas, ponerles nombres, encontrarles formas. Siempre soñé con estar tranquilo, sin demasiadas preocupaciones. Mi mundo tenía demasiadas patas como para darle la vuelta.
Entonces llegaste.
Desde entonces sueño con ver un amanecer desde la cubierta de un barco lo suficientemente grande para que quepamos los dos, sentir que tu mirada me rodea, haciéndome sentir aún mas pequeño, notar tus dedos acariciandome y respirar en tu cuello mientras me susurras cualquier tontería y, ahí, sin dejar de pensar en ti, hacer que el tiempo corra, que se haga de noche para poder ver las estrellas. Contigo. Ponerles nombres. El tuyo. Encontrarles formas. A tus lunares. Siempre soñé con estar tranquilo, sin demasiadas preocupaciones. Y llegaste tu poniendo todas y cada una de las patas del reves.
Tengo un sueño. Eres tú.
Entonces llegaste.
Desde entonces sueño con ver un amanecer desde la cubierta de un barco lo suficientemente grande para que quepamos los dos, sentir que tu mirada me rodea, haciéndome sentir aún mas pequeño, notar tus dedos acariciandome y respirar en tu cuello mientras me susurras cualquier tontería y, ahí, sin dejar de pensar en ti, hacer que el tiempo corra, que se haga de noche para poder ver las estrellas. Contigo. Ponerles nombres. El tuyo. Encontrarles formas. A tus lunares. Siempre soñé con estar tranquilo, sin demasiadas preocupaciones. Y llegaste tu poniendo todas y cada una de las patas del reves.
Tengo un sueño. Eres tú.
viernes, 16 de octubre de 2015
Despacio.
Despacio, por favor, si te vas hazlo lentamente. Si no volvemos a vernos quiero tener una buena imagen que recordar de ti, despacio y con paso tembloroso te alejas, dos lagrimas brotan por tus mejillas, veinte por las mías. Despacio te vas, despacio te recordare. Despacio te iré olvidando sin llegar a olvidarte nunca. Despacio como el beso de dos enamorados bajo una puesta de sol. Despacio cerré los ojos, deprisa los abrí esperando que todo fuese un sueño. Demasiado rápido me di cuenta de que no lo era. Ahora, despacio, escribo esto, despacio te recuerdo, y aún mas despacio pienso "Como pudo pasar todo tan rápido"
martes, 13 de octubre de 2015
Por algún lado hay que empezar.
Es curioso como un día sin previo aviso, algo dentro de ti se rompe.
Cuando esto pasa creo que todos tenemos la misma reacción, buscar una salida, algo que nos alivie o nos mantenga distraidos para pensar el menor tiempo posible en lo que sea que nos atormenta.
Yo me rompí hace tiempo, pero hasta hoy no empezaron a cortar mis pedacitos.
Estaís en frente de mi salida, una ventana a través de la que podré gritar hasta dejarme la garganta (O los dedos), gritar tan fuerte que mi voz resuene por encima de esas voces que no dejan de repetir en mi cabeza "No eres suficiente".
Siéntate y ponte cómodo, coge una taza de café, un té, un Cola-cao. Lo que te apetezca.
Siéntate, lee y, si es posible, disfruta.
Cuando esto pasa creo que todos tenemos la misma reacción, buscar una salida, algo que nos alivie o nos mantenga distraidos para pensar el menor tiempo posible en lo que sea que nos atormenta.
Yo me rompí hace tiempo, pero hasta hoy no empezaron a cortar mis pedacitos.
Estaís en frente de mi salida, una ventana a través de la que podré gritar hasta dejarme la garganta (O los dedos), gritar tan fuerte que mi voz resuene por encima de esas voces que no dejan de repetir en mi cabeza "No eres suficiente".
Siéntate y ponte cómodo, coge una taza de café, un té, un Cola-cao. Lo que te apetezca.
Siéntate, lee y, si es posible, disfruta.
Espero que mi dolor sea de tu agrado.
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